MABON, tiempo de cosecha.

Al llegar el otoño, la sabiduría de la naturaleza nos da un mensaje al soltar sus hojas… morir un poco cada vez, para renovar la vida. Para volver a nacer, hay que morir. Hay que tirar lo viejo, analizar que queremos renovar, de que nos queremos deshacer, que nos estorba en nuestra vida para mejorar.
El Equinoccio de Otoño nos ofrece la oportunidad para clarificar hacia donde queremos dirigirnos y para visualizar y re energizar nuestras metas. Es momento de revisar lo que hasta ahora has obtenido y revalorar el camino en el que te encuentras.

Decide si quieres seguir adelante… si no, quizá esta sea tu oportunidad para cambiar el rumbo.También si has estado trabajado en algo y aún no se ha concretado, este es el tiempo de revisar qué más requieres para completarlo de una buena vez.

¿Qué parte de tu personalidad aún no has explorado y te gustaría poner de manifiesto?

Es un buen momento para dar las gracias por las metas alcanzadas, gratitud por la cosecha.Y también gratitud por lo que está por venir aunque aún no lo veamos manifestado.Este momento ayuda a reconocer los aspectos que necesitan equilibrio en nuestra vida. Hacer un balance de lo obtenido hasta ahora, de lo que está pendiente y lo que se necesita para esta nueva etapa.El otoño es un tiempo que nos va acercando a la interiorización, así que se puede aprovechar este tiempo para darse el espacio de estar solo: creando, reflexionando, para explorar y aprender nuevos hábitos, habilidades y aprendizajes.

El día y la noche duran lo mismo y después las noches son más largas que los días.Es un tiempo para mirar hacia dentro, hacer un balance, dar gracias por la cosecha y prepararse para el momento de soñar.

¿Cuáles han sido tus aprendizajes y logros en este periodo?, ¿en qué has cambiado o avanzado?

Honra tus cosechas, incluso si no has alcanzado todas tus metas, honra cada uno de tus pasos.Las noches más largas simbolizan más noches para soñar.Profundiza en el significado de tus sueños y del idioma de tu interior.Momento de cosechar y descubrir en la oscuridad la gran luz de nuestro Ser.